RV
1909
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RVI
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Notas/Ref
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MATEO
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MATEO
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Jesús enseña sobre
el divorcio
(Mr 10:1-12; Lc
16:18)
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Jesús enseña sobre
el divorcio
(Mr 10:1-12; Lc
16:18)
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(19:1) Y
ACONTECIÓ que acabando Jesús estas palabras, se pasó de Galilea, y vino á los
términos de Judea, pasado el Jordán.
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(19:1) Sucedió
que cuando Jesús terminó estas palabras, se alejó de Galilea, y fue a las
regiones de Judea al otro lado del Jordán.
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Mr 10:1
Jesús
termina su ministerio en la zona norte y se dirige a Judea
Sep Oct del año 30 dC
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(19:2) Y le siguieron muchas gentes, y los sanó allí.
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(19:2) Y le siguieron grandes multitudes, y los sanó allí.
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(19:3) Entonces se llegaron á él los Fariseos, tentándole, y
diciéndole: ¿Es lícito al hombre repudiar á su mujer por cualquiera causa?
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(19:3) Entonces vinieron a él los fariseos, tentándole y diciéndole:
¿Está permitido al hombre divorciarse (repudiar, separarse) de su mujer por
cualquier causa?
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Mr 10:2
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(19:4) Y él respondiendo, les dijo: ¿No habéis leído que el que los
hizo al principio, macho y hembra los hizo,
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(19:4) El, respondiendo, les dijo: ¿No han leído que
el que los hizo al principio, varón y
hembra los hizo,
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Gn 1:27
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(19:5) Y dijo: Por tanto, el hombre dejará padre y madre, y se unirá á
su mujer, y serán dos en una carne?
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(19:5) y dijo: Por esto el hombre
dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne?
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Gn 2:24; Ef 5:31
1 Co 6:16
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(19:6) Así que, no son ya más dos, sino una carne: por tanto, lo que
Dios juntó, no lo aparte el hombre.
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(19:6) De modo que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo
que Dios juntó, no lo separe el hombre.
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1 Co 7:10
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(19:7) Dícenle: ¿Por qué, pues, Moisés mandó dar carta de divorcio, y
repudiarla?
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(19:7) Le dijeron: ¿Por qué, por lo tanto, mandó Moisés dar carta de
divorcio, y divorciarla (repudiarla)?
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Dt 24:1; Jr 3:1
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(19:8) Díceles: Por la dureza de vuestro corazón Moisés os permitió
repudiar á vuestras mujeres: mas al principio no fue así.
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(19:8) El les dijo: Por la dureza del corazón de ustedes, Moisés les permitió divorciarse
(repudiar, separarse) a sus
mujeres; mas al principio no fue así.
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(19:9) Y yo os digo que cualquiera que repudiare á su mujer, si no
fuere por causa de fornicación, y se casare con otra, adultera: y el que se
casare con la repudiada, adultera.
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(19:9) Y yo les digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por
causa de fornicación, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la
repudiada, adultera.
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Mt 5:32; Mr 10:11
Lc 16:18; 1 Co 7:10
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(19:10) Dícenle sus discípulos: Si así es la condición del hombre con su
mujer, no conviene casarse.
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(19:10) Le dijeron sus discípulos: Si así es la condición del hombre con
su mujer, no conviene casarse.
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(19:11) Entonces él les dijo: No todos reciben esta palabra, sino
aquellos á quienes es dado.
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(19:11) Entonces él les dijo: No todos son capaces de recibir esto,
sino aquellos a quienes es dado.
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1 Co 7:7,17
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(19:12) Porque hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre; y
hay eunucos, que son hechos eunucos por los hombres; y hay eunucos que se
hicieron á sí mismos eunucos por causa del reino de los cielos; el que pueda
ser capaz de eso, séalo.
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(19:12) Pues hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre, y hay
eunucos que son hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos
se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que sea capaz de
recibir esto, que lo reciba.
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Jesús bendice a los
niños
(Mr 10:13-16; Lc
18:15-17)
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Jesús bendice a los
niños
(Mr 10:13-16; Lc
18:15-17)
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(19:13) Entonces le fueron presentados unos niños, para que pusiese las
manos sobre ellos, y orase; y los discípulos les riñeron.
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(19:13) Entonces le fueron presentados unos niños, para que pusiese las
manos sobre ellos, y orase; y los discípulos les reprendieron.
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Mr 10:13; Lc 18:15
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(19:14) Y Jesús dijo: Dejad á los niños, y no les impidáis de venir á
mí; porque de los tales es el reino de los cielos.
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(19:14) Pero Jesús dijo: Dejen a los niños venir a mí, y no se lo impidan; porque de los
tales es el reino de los cielos.
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Mt 18:3; 1 Co 14:20
1 Pe 2:2
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(19:15) Y habiendo puesto sobre ellos las manos se partió de allí.
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(19:15) Y habiendo puesto sobre ellos las manos, se fue de allí.
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El joven rico
(Mr 10:17-31; Lc
18:18-30)
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El joven rico
(Mr 10:17-31; Lc
18:18-30)
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(19:16) Y he aquí, uno llegándose le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré
para tener la vida eterna?
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(19:16) Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para
tener la vida eterna?
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Mt 10:17; Lc 18:18
Mr 10:17
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(19:17) Y él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno sino
uno, es á saber, Dios: y si quieres entrar en la vida, guarda los
mandamientos.
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(19:17) El le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Más si
quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos.
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Mr 10:18; Lc 18:19
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(19:18) Dícele: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No mataras: No adulterarás: No
hurtarás: No dirás falso testimonio:
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(19:18) Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso
testimonio.
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Ex 20:12; Dt 5:17
Ro 13:9
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(19:19) Honra á tu padre y á tu madre: y, Amarás á tu prójimo como á ti
mismo.
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(19:19) Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti
mismo.
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Lv 19:17; Mt
22:39
Mr 12:31; Ga 5:14
Stg 2:8
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(19:20) Dícele el mancebo: Todo esto guardé desde mi juventud: ¿qué más
me falta?
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(19:20) El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud.
¿Qué más me falta?
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(19:21) Dícele Jesús: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que
tienes, y da lo á los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
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(19:21) Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dáselo a los
pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.
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Lc 12:33; 16:9
Mt 6:19; 1 Ti 6:19
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(19:22) Y oyendo el mancebo esta palabra, se fue triste, porque tenía
muchas posesiones.
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(19:22) Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas
posesiones.
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(19:23) Entonces Jesús dijo á sus discípulos: De cierto os digo, que un
rico difícilmente entrará en el reino de los cielos.
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(19:23) Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto les digo,
que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos.
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Pr 11:28; Mr 10:23
Lc 18:24
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(19:24) Mas os digo, que más liviano trabajo es pasar un camello por el
ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios.
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(19:24) Otra vez les digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de
una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios.
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(19:25) Mas sus discípulos, oyendo estas cosas, se espantaron en gran
manera, diciendo: ¿Quién pues podrá ser salvo?
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(19:25) Sus discípulos, oyendo esto, se asombraron en gran manera,
diciendo: ¿Quién, por lo tanto, podrá ser salvado?
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(19:26) Y mirándolos Jesús, les dijo: Para con los hombres imposible es
esto; mas para con Dios todo es posible.
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(19:26) Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres
esto es imposible; mas para Dios todo es posible.
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Job 42:2; Jr 32:17
Zc 8:6; Lc 1:37; 18:27
Salvación:
Mt 24:13; Stg 1:21,25
1 Pe 1:3-5; 1 Te 5:9
1 Pe 2:2; Ro 10:9,10
Mt 10:22
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(19:27) Entonces respondiendo Pedro, le dijo: He aquí, nosotros hemos
dejado todo, y te hemos seguido: ¿qué pues tendremos?
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(19:27) Entonces respondiendo Pedro, le dijo: He aquí, nosotros lo hemos
dejado todo, y te hemos seguido; ¿qué, por lo tanto, tendremos?
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Mt 4:20; Mr 10:28
Lc 5:11; 18:28
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(19:28) Y Jesús les dijo: De cierto os digo, que vosotros que me habéis
seguido, en la regeneración, cuando se sentará el Hijo del hombre en el trono
de su gloria, vosotros también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar á
las doce tribus de Israel.
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(19:28) Y Jesús les dijo: De cierto les digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre
se siente en el trono de su gloria, ustedes que me han seguido también se sentarán
sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel.
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Lc 22:30
Dn 7:9; Ap 20:11;
19:4
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(19:29) Y cualquiera que dejare casas, ó hermanos, ó hermanas, ó padre,
ó madre, ó mujer, ó hijos, ó tierras, por mi nombre, recibirá cien veces
tanto, y heredará la vida eterna.
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(19:29) Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o
padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien
veces más, y heredará la vida eterna.
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Dt 33:9; Job
42:12
Dn 7:9; Ap 4:4;
11:16
Ap 20:4
Seguir a Jesús:
Mt 8:22; 9:9; 19:21
Mt 10:32; Mr 10:21
Jn 1:43; 21:19
Mt 10:37-38; Lc
16:13
Lc 14:26; Jn 12:25
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(19:30) Mas muchos primeros serán postreros, y postreros primeros.
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(19:30) Pero muchos primeros serán últimos, y últimos, primeros.
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Mr 10:31; Lc 13:30
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