RV
1909
|
RVI
|
Notas/Ref
|
MATEO
|
MATEO
|
|
Parábola del sembrador
(Mr 4:1-9; Lc 8:4-8)
|
Parábola del sembrador
(Mr 4:1-9; Lc 8:4-8)
|
|
(13:1) Y AQUEL día,
saliendo Jesús de casa, se sentó junto á la mar.
|
(13:1) Aquel día salió
Jesús de la casa y se sentó junto al mar.
|
Mr 4:1; Lc 8:4-5
|
(13:2) Y se allegaron á él muchas gentes; y entrándose él en el barco,
se sentó, y toda la gente estaba á la ribera.
|
(13:2) Y se le juntó mucha gente; de modo que entro él en la barca, se
sentó, y toda la gente estaba en la playa.
|
Lc 5:3
|
(13:3) Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí el que
sembraba salió á sembrar.
|
(13:3) Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el
sembrador salió a sembrar.
|
|
(13:4) Y sembrando, parte de la simiente cayó junto al camino; y
vinieron las aves, y la comieron.
|
(13:4) Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y
vinieron las aves y la comieron.
|
|
(13:5) Y parte cayó en pedregales, donde no tenía mucha tierra; y nació
luego, porque no tenía profundidad de tierra:
|
(13:5) Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó
pronto, porque no tenía profundidad de tierra;
|
|
(13:6) Mas en saliendo el sol, se quemó; y secóse, porque no tenía
raíz.
|
(13:6) pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
|
|
(13:7) Y parte cayó en espinas; y las espinas crecieron, y la ahogaron.
|
(13:7) Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la
ahogaron.
|
|
(13:8) Y parte cayó en buena tierra, y dió fruto, cuál a ciento, cuál á
sesenta, y cuál á treinta.
|
(13:8) Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál
a sesenta, y cuál a treinta por uno.
|
|
(13:9) Quien tiene oídos para oír, oiga.
|
(13:9) El que tiene oídos para oír, oiga.
|
|
Motivo de las parábolas
(Mr 4:10-12; Lc 8:9-10)
|
Motivo de las parábolas
(Mr 4:10-12; Lc 8:9-10)
|
|
(13:10) Entonces, llegándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les
hablas por parábolas?
|
(13:10) Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les
hablas por parábolas?
|
Mr 4:10; Lc 8:9
|
(13:11) Y él respondiendo, les dijo: Por que á vosotros es concedido
saber los misterios del reino de los cielos; mas á ellos no es concedido.
|
(13:11) El respondiendo, les dijo: Porque a ustedes les es dado saber los misterios del reino de los
cielos; mas a ellos no les es dado.
|
2 Co 3:14; Mt 11:25
|
(13:12) Porque á cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; pero al
que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
|
(13:12) Porque a cualquiera que tiene, se le dará, y tendrá más; pero al
que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
|
Mt 25:29; Mr 4:24-25
Lc 8:18; 19:26
|
(13:13) Por eso les hablo por parábolas; porque viendo no ven, y oyendo
no oyen, ni entienden.
|
(13:13) Por eso les hablo por parábolas: porque viendo no ven, y oyendo no
oyen, ni entienden.
|
|
(13:14) De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que
dice: De oído oiréis, y no entenderéis; Y viendo veréis, y no miraréis.
|
(13:14) De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dijo: De oído oirán, y no entenderán; Y viendo
verán, y no percibirán.
|
Is 6:9; Mr 4:12;
Lc 8:10
Jn 12:40; Hch
28:26
Ro 11:8
|
(13:15) Porque el corazón de este pueblo está engrosado, Y de los oídos
oyen pesadamente, Y de sus ojos guiñan: Para que no vean de los ojos, Y oigan
de los oídos, Y del corazón entiendan, Y se conviertan, Y yo los sane.
|
(13:15) Porque el corazón
de este pueblo se ha engrosado, Y con los oídos oyen pesadamente, Y han
cerrado sus ojos; Para que no vean con los ojos, Y oigan con los oídos, Y con
el corazón entiendan, Y se conviertan, Y yo los sane.
|
|
(13:16) Mas bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos,
porque oyen.
|
(13:16) Pero dichosos (afortunados,
bienaventurados) sus ojos, porque ven; y sus oídos, porque oyen.
|
Lc 10:23; Jn 20:29
1 Pe 1:8
|
(13:17) Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon
ver lo que veis, y no lo vieron: y oir lo que oís, y no lo oyeron.
|
(13:17) Porque de cierto les digo, que muchos profetas y justos desearon
ver lo que ven, y no lo vieron; y oír lo que oyen, y no lo oyeron.
|
1 Pe 1:10
|
Explicación de la parábola del
sembrador
(Mr 4:13-20; Lc 8:11-15)
|
Explicación de la parábola del
sembrador
(Mr 4:13-20; Lc 8:11-15)
|
|
(13:18) Oid, pues, vosotros la parábola del que siembra:
|
(13:18) Oigan, por lo tanto, ustedes la parábola del sembrador:
|
Mr 4:13; Lc 8:11
|
(13:19) Oyendo cualquiera la palabra del reino, y no entendiéndola,
viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón: éste es el que fue
sembrado junto al camino.
|
(13:19) Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo,
y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado
junto al camino.
|
Mt 4:23
|
(13:20) Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la
palabra, y luego la recibe con gozo.
|
(13:20) Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la
palabra, y al momento la recibe con gozo;
|
|
(13:21) Mas no tiene raíz en sí, antes es temporal que venida la
aflicción ó la persecución por la palabra, luego se ofende.
|
(13:21) pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al
venir la aflicción o la persecución por causa de la palabra, enseguida
tropieza.
|
|
(13:22) Y el que fue sembrado en espinas, éste es el que oye la palabra;
pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas, ahogan la palabra, y
hácese infructuosa.
|
(13:22) El que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra,
pero la ansiedad de este siglo y el fraude de las ganancias comerciales
ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
|
Mt 19:23; Mr
10:23
Lc 18:24; 1 Ti
6:9
Afán, Vanidad:
Ef 4:17-32; Stg
4:4
1 Jn 2:15-17
2 Co 6:14-16
Mt 6:25-34; 1 Co
10:20
No afaneis:
Sal 55:22; Mt 6:25
Lc 12:22; Fil 4:6
1 Ti 6:8; 1 Co 9:9
Heb 13:5
|
(13:23) Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y
entiende la palabra, y el que lleva fruto: y lleva uno á ciento, y otro á
sesenta, y otro á treinta.
|
(13:23) Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y
entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta
por uno.
|
|
Parábola del trigo y la cizaña
|
Parábola del trigo y la cizaña
|
|
(13:24) Otra parábola les propuso, diciendo: El reino de los cielos es
semejante al hombre que siembra buena simiente en su campo:
|
(13:24) Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los
cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo;
|
|
(13:25) Mas durmiendo los hombres, vino su enemigo, y sembró cizaña
entre el trigo, y se fue.
|
(13:25) pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña
entre el trigo, y se fue.
|
|
(13:26) Y como la hierba salió é hizo fruto, entonces apareció también
la cizaña.
|
(13:26) Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la
cizaña.
|
|
(13:27) Y llegándose los siervos del padre de la familia, le dijeron:
Señor, ¿no sembraste buena simiente en tu campo? ¿de dónde, pues, tiene cizaña?
|
(13:27) Vinieron entonces los esclavos del padre de familia y le dijeron:
Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, por lo tanto,
tiene cizaña?
|
|
(13:28) Y él les dijo: Un hombre enemigo ha hecho esto. Y los siervos le
dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la cojamos?
|
(13:28) El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los esclavos le dijeron:
¿Quieres, por lo tanto, que vayamos y la arranquemos?
|
|
(13:29) Y él dijo: No; porque cogiendo la cizaña, no arranquéis también
con ella el trigo.
|
(13:29) El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquen
también con ella el trigo.
|
|
(13:30) Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al
tiempo de la siega yo diré á los segadores: Coged primero la cizaña, y atadla
en manojos para quemarla; mas recoged el trigo en mi alfolí.
|
(13:30) Dejen crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al
tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recojan primero la cizaña, y atenla
en manojos para quemarla; pero recojan el trigo en mi granero.
|
Mt 3:12
|
Parábola del grano de mostaza
(Mr 4:30-32; Lc 13:18-19)
|
Parábola del grano de mostaza
(Mr 4:30-32; Lc 13:18-19)
|
|
(13:31) Otra parábola les propuso, diciendo: El reino de los cielos es
semejante al grano de mostaza, que tomándolo alguno lo sembró en su campo:
|
(13:31) Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los
cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su
campo;
|
Mr 4:30; Lc 13:18
|
(13:32) El cual á la verdad es la más pequeña de todas las simientes;
mas cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, que
vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.
|
(13:32) el cual, de hecho, es la más pequeña de todas las semillas; pero
cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de modo que
vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.
|
|
Parábola de la levadura en la masa
(Lc 13:20-21)
|
Parábola de la levadura en la masa
(Lc 13:20-21)
|
|
(13:33) Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante á la
levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que
todo quedó leudo.
|
(13:33) Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una
mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
|
Lc 13:20-21
Sata:
Medida hebrea para cereales y semillas equivalente a un poco menos que un
Celemín = 4,625 litros.
1
Sata = 4,4 litros
3
Satas = 13,2 litros o 13,2 (dm3)
|
El porqué de hablar con parábolas
(Mr 4:33-34)
|
El porqué de hablar con parábolas
(Mr 4:33-34)
|
|
(13:34) Todo esto habló Jesús por parábolas á las gentes, y sin
parábolas no les hablaba:
|
(13:34) Todo esto habló Jesús por parábolas a la gente, y sin parábolas
no les hablaba;
|
Mr 4:33
|
(13:35) Para que se cumpliese lo que fue dicho por el profeta, que dijo:
Abriré en parábolas mi boca; Rebosaré cosas escondidas desde la fundación del
mundo.
|
(13:35) para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; Declararé cosas escondidas desde
la fundación del mundo.
|
Sal 78:2
|
Explicación de la Parábola de la cizaña
|
Explicación de la Parábola de la cizaña
|
|
(13:36) Entonces, despedidas las gentes, Jesús se vino á casa; y
llegándose á él sus discípulos, le dijeron: Decláranos la parábola de la
cizaña del campo.
|
(13:36) Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y
acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la
cizaña del campo.
|
|
(13:37) Y respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena simiente es
el Hijo del hombre;
|
(13:37) Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.
|
|
(13:38) Y el campo es el mundo; y la buena simiente son los hijos del
reino, y la cizaña son los hijos del malo;
|
(13:38) El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y
la cizaña son los hijos del malo.
|
Gn 3:15; 4:11-15
1 Jn 3:12; 5:19
|
(13:39) Y el enemigo que la sembró, es el diablo; y la siega es el fin
del mundo, y los segadores son los ángeles.
|
(13:39) El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del
siglo; y los segadores son los ángeles.
|
Jl 3:13; Ap 14:15
|
(13:40) De manera que como es cogida la cizaña, y quemada al fuego, así
será en el fin de este siglo.
|
(13:40) De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego,
así será en el fin de este siglo.
|
|
(13:41) Enviará el Hijo del hombre sus ángeles, y cogerán de su reino
todos los escándalos, y los que hacen iniquidad,
|
(13:41) Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino
a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,
|
|
(13:42) Y los echarán en el horno de fuego: allí será el lloro y el crujir
de dientes.
|
(13:42) y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir
de dientes.
|
Mt 8:12; 22:13; 24:51
Mt 25:30; Lc 13:28
|
(13:43) Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su
Padre: el que tiene oídos para oir, oiga.
|
(13:43) Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su
Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.
|
Dn 12:3; 1 Co 15:42
|
Parábola del tesoro escondido
|
Parábola del tesoro escondido
|
|
(13:44) Además, el reino de los cielos es semejante al tesoro escondido
en el campo; el cual hallado, el hombre lo encubre, y de gozo de ello va, y
vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
|
(13:44) Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido
en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por
ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
|
Fil 3:7
|
Parábola de la perla de gran precio
|
Parábola de la perla de gran precio
|
|
(13:45) También el reino de los cielos es semejante al hombre tratante,
que busca buenas perlas;
|
(13:45) También el reino de los cielos es semejante a un mercader que
busca buenas perlas,
|
|
(13:46) Que hallando una preciosa perla, fue y vendió todo lo que tenía,
y la compró.
|
(13:46) que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que
tenía, y la compró.
|
|
Parábola de la red
|
Parábola de la red
|
|
(13:47) Asimismo el reino de los cielos es semejante á la red, que
echada en la mar, coge de todas suertes de peces:
|
(13:47) Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada
en el mar, recoge de toda clase de peces;
|
|
(13:48) La cual estando llena, la sacaron á la orilla; y sentados,
cogieron lo bueno en vasos, y lo malo echaron fuera.
|
(13:48) y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo
bueno en cestas, y lo malo echan fuera.
|
|
(13:49) Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán á
los malos de entre los justos,
|
(13:49) Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los
malos de entre los justos,
|
|
(13:50) Y los echarán en el horno del fuego: allí será el lloro y el
crujir de dientes.
|
(13:50) y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir
de dientes.
|
Mt 13:42
|
Parábola de la red
|
Parábola de la red
|
|
(13:51) Díceles Jesús: ¿Habéis entendido todas estas cosas? Ellos
responden: Sí, Señor.
|
(13:51) Jesús les dijo: ¿Han entendido todas estas cosas? Ellos respondieron: Sí, Señor.
|
|
(13:52) Y él les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los
cielos, es semejante á un padre de familia, que saca de su tesoro cosas
nuevas y cosas viejas.
|
(13:52) El les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los cielos es semejante
a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.
|
|
Jesús en Nazaret
(Mr 6:1-6; Lc 4:16-30)
|
Jesús en Nazaret
(Mr 6:1-6; Lc 4:16-30)
|
|
(13:53) Y aconteció que acabando Jesús estas parábolas, pasó de allí.
|
(13:53) Sucedió que cuando terminó Jesús estas parábolas, se fue de
allí.
|
Mr 6:1; Lc 4:16
|
(13:54) Y venido á su tierra, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de
tal manera que ellos estaban atónitos, y decían: ¿De dónde tiene éste esta
sabiduría, y estas maravillas?
|
(13:54) Y venido a su tierra, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de modo
que se maravillaban, y decían: ¿De dónde tiene éste esta sabiduría y estos
milagros?
|
Mr 6:2
|
(13:55) ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿no se llama su madre María,
y sus hermanos Jacobo y José, y Simón, y Judas?
|
(13:55) ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María,
y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas?
|
Jn 6:42
|
(13:56) ¿Y no están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues,
tiene éste todas estas cosas?
|
(13:56) ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, por lo
tanto, tiene éste todas estas cosas?
|
|
(13:57) Y se escandalizaban en él. Mas Jesús les dijo: No hay profeta
sin honra sino en su tierra y en su casa.
|
(13:57) Y se escandalizaban de él. Pero Jesús les dijo: No hay profeta sin
honra, sino en su propia tierra y en su casa.
|
Mr 6:4; Lc 4:24; Jn 4:44
|
(13:58) Y no hizo allí muchas maravillas, á causa de la incredulidad de
ellos.
|
(13:58) Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de
ellos.
|
|